top of page

La confianza y la inocuidad en la cadena de Berries no se tranza.

En el centro de la producción de frutillas y berries yace un contrato no escrito: la inocuidad, la sostenibilidad y la confianza de los consumidores.


ree

La excelencia en nuestra producción no es un objetivo comercial, es un imperativo ético.


Cuando hablamos de calidad, hablamos también de inocuidad, hablamos de asegurar que los alimentos sean saludables, sin enfermedades, sin residuos, pensando en el consumidor.


El Compromiso con la Vida: La conciencia nos obliga a ser custodios rigurosos. No se trata solo de minimizar, sino de eliminar el uso de pesticidas nocivos para la salud humana. Cuando le hacemos mal al medioambiente, el daño se propaga directamente a nuestros consumidores y compromete nuestra propia rentabilidad a largo plazo.


La Regla de Oro: Respetar los Límites Máximos de Residuos (LMR) es el piso de nuestro trabajo. Es la prueba tangible de que el esfuerzo de todo el sector se alinea con las expectativas globales de inocuidad.


El desafío de la visibilidad: ¿Cómo demostramos nuestra ética?


La voluntad de hacer las cosas bien existe, especialmente en la Agricultura Familiar que produce nuestros berries. El desafío es hacer visible ese esfuerzo en tiempo real para el resto de la cadena. Aquí es donde la digitalización emerge como la clave, no como una moda, sino como el único mecanismo para forjar una trazabilidad inquebrantable desde el campo hasta la mesa.


Un aliado digital que llevas al campo: Modag

La era de los cuadernos de campo desordenados quedó atrás. Para el productor que ya maneja su día a día con WhatsApp, la adopción de herramientas digitales de registro como Modag es un paso natural. Esta sencillez nos permite:


Validar el Esfuerzo: Convertir la acción de aplicar o registrar en una data verificable al instante.


Unir la Cadena: Otorgar a la industria compradora la certeza y la información de valor que necesita sobre el historial de uso de pesticidas de sus proveedores, sin fricciones ni esperas.


La digitalización es el acto de transparencia que valida el compromiso ético de toda nuestra cadena. Nos permite mirar al consumidor a los ojos y decir: "Sabemos de dónde viene, cómo se cuidó, y garantizamos que es seguro para que lo consuman en sus casas"


Invitamos a la reflexión: ¿Estamos utilizando todas las herramientas a nuestro alcance para convertir nuestra ética de producción en una prueba digital, protegiendo así el futuro de la cadena de berries?





 
 
 

Comentarios


bottom of page